Los gases no son solo cosa de humanos… ¡nuestros queridos peludos también los sufren! Si tu perro tiene muchos gases, será mejor que investigues cuáles son las causas para saber si necesita ir al veterinario o si existe algún tratamiento que le ayude a reducir sus flatulencias.
En este post, te explicamos detalladamente qué debes hacer si tu perro se tira más gases de lo habitual. ¡Vamos a ello!
¿Por qué mi perro tiene muchos gases? Causas
“¡Ayuda! Mi perro tiene muchos gases apestosos y no sé qué hacer”. Si has pronunciado esta frase más veces de las que te gustaría, el primer paso y el más importante es buscar el origen del problema.
Estas son las causas más habituales que pueden provocar gases en perros:
1. Una alimentación inadecuada
Es la razón número uno. Algunos piensos contienen ingredientes difíciles de digerir para muchos perros, como cereales o ciertas proteínas.
Además, los cambios bruscos en su dieta y la comida poco saludable tampoco ayudan. Asegúrate de que tu mascota lleve una alimentación equilibrada, con los nutrientes y la fibra necesarios.
2. Tendencia a comer demasiado rápido
Si tu peludo engulle como si no hubiera un mañana, traga mucho aire. Ese aire tiene que salir por algún sitio, ¡y ya sabes por cuál! Este problema es muy común en razas glotonas o en peludos que sienten ansiedad por la comida.
3. Intolerancias o alergias alimentarias
Si tu perro tiene muchos gases y diarrea, es muy posible que haya algún alimento que no le siente bien. A veces es el pollo, otras veces el gluten, la lactosa o ciertos aditivos. Detectarlo puede requerir tiempo y ayuda veterinaria.
4. Problemas digestivos o gastrointestinales
Colitis, gastritis, parásitos o incluso un desequilibrio de la flora intestinal pueden provocar a tu compañero gases constantes. Ante cualquier síntoma extraño, como vómitos o diarrea persistente, lo ideal es visitar al veterinario cuanto antes.
5. Falta de ejercicio
El movimiento favorece la digestión. Por eso, los perros que llevan una vida muy sedentaria tienden a acumular más gases, igual que nos pasa a nosotros cuando estamos muchas horas sentados.
Gases en cachorros, ¿son normales?
Los gases en cachorros son bastante más frecuentes que en perros adultos. Y es que su sistema digestivo está todavía en desarrollo, por eso es habitual que no digieran del todo bien algunos alimentos.
Además, muchos comen muy rápido: por ejemplo, cuando compiten con sus hermanos o cuando están aprendiendo rutinas nuevas. Ahora bien, aunque sea normal que un cachorro tenga gases, no significa que tengamos que ignorarlos.
Si notas que tu perro tiene muchos gases apestosos, diarrea o malestar, consulta al veterinario. Los pequeños son más sensibles a la deshidratación y los desequilibrios digestivos, ¡así que es mejor tener cuidado!
Para protegerlo de lo que pueda pasar, te recomendamos contratar un buen seguro para cachorros, ¡como el que te ofrecemos en Kalibo!
¿Qué hacer si mi perro tiene muchos gases? ¿Cuándo ir al veterinario?
“Mi perro tiene muchos gases, ¿qué le puedo dar?” ¡La duda por excelencia! Y la respuesta es que depende de qué esté provocando sus gases, pero es preferible no darle nada para no empeorar la situación.
Debes acudir al veterinario si:
- Los gases vienen acompañados de diarrea persistente.
- Detectas sangre en las heces.
- Hay pérdida de apetito o decaimiento y pérdida de peso.
- Vomita con frecuencia.
- Los gases no mejoran tras varios días de cambios en la dieta.
¿Cómo reducir los gases de un perro? Tratamientos
Si quieres saber cómo reducir los gases de un perro, toma nota de estas recomendaciones:
- Ajusta su alimentación. Prueba un pienso de mejor calidad, con buenas proteínas y pocos cereales para que sea más digerible. Haz siempre los cambios de forma gradual para evitar un efecto rebote.
- Controla la forma en la que come. Si tu mascota engulle la comida, prueba a usar comederos antivoracidad o dividir las comidas en raciones más pequeñas. Esto reducirá la cantidad de aire que traga y, por tanto, la flatulencia.
- Evita darle premios grasos o comida de humanos. Sí, es difícil resistirse a su carita de pena, ¡pero su barriga te lo agradecerá!
- Aumenta su ejercicio diario. Paseos más largos o juegos más activos pueden ayudar muchísimo. ¿Qué tal si pruebas algunos de los mejores deportes para practicar con perros? ¡Os divertiréis mucho!
- Prueba con probióticos o suplementos digestivos. Hay productos especialmente pensados para mejorar la flora intestinal de los perros y reducir sus gases. Eso sí, siempre consultando primero al veterinario.
- Revisa sus parásitos. Debes tener claro cada cuánto tiempo desparasitar a tu perro, sobre todo si tiene gases y diarrea.
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Te recomendamos echar un vistazo a nuestras pólizas con amplias coberturas. Y recuerda: cuando tu perro está bien, tú también respiras mejor. ¡Más aún si no hay gases ni mal olor de por medio!