Con la llegada del mes de diciembre y las fechas navideñas, muchos hogares vuelven a plantearse una vez más si adoptar una mascota a la familia. Sobre todo, son los más pequeños de la casa los que la reclaman como regalo de Navidad.
La adopción de mascotas es un regalo también para nuestra propia salud. Y es que, son muchos los estudios que concluyen que el hecho de cuidarlas y de disfrutar de actividades con ellas, disminuye nuestra tensión y estrés y aumenta la sensación de bienestar y autoestima.
Sin embargo, hay otros aspectos que debes tener muy en cuenta a la hora de dar el paso de adoptar una mascota, especialmente si lo estás valorando durante las fechas navideñas. En ellas parece que la euforia por regalar se traslada a decisiones que van más allá de un mero capricho pasajero que admite devoluciones, como el hecho de tener un animal en casa.
Adoptar a un perro, a un gato, a un hurón o a cualquier otro animal implica la adquisición de una serie de responsabilidades que hay que asumir con todas las consecuencias. A un animal adoptado hay que dedicarle tiempo, cariño y dinero, limita nuestra movilidad durante las vacaciones e incluso en actividades diarias, como el acceso a comercios.
Se trata de una decisión con importantes repercusiones en nuestra vida y la de la futura mascota, por lo que hay que conocer su naturaleza y cubrir necesidades, como la alimentación, la atención sanitaria o garantizar su integración familiar. Estas cuestiones son esenciales para que el animal se sienta como en casa.
¿Cómo son las adopciones en España?
Los albergues están saturados de perros y gatos que esperan un nuevo hogar y, aunque los españoles adoptamos muchísimo más después de la pandemia con la llegada del teletrabajo, todavía nos queda camino por recorrer para equipararnos al grado de concienciación con el cuidado y respeto de los animales que existe en otros países europeos, como Francia o Inglaterra, donde el abandono es casi anecdótico.
Por el contrario, 300.000 animales son abandonados cada año en España, lo que nos hace pensar que pedir mascotas a los Reyes sigue siendo una mala idea, ya que se hace sin pensar en la responsabilidad que la adopción conlleva. Y es que no solo estamos haciéndonos responsables del bienestar, salud y vida de un ser vivo, sino que tendremos que cumplir con una serie de obligaciones legales en algunos casos, como por ejemplo, si nuestro perro adoptado es considerado perro de manejo especial.
En ese caso, tendremos que contar con un seguro para perros ppp dado de alta y en regla, al menos a día de hoy a la espera de novedades sobre la ley de bienestar animal.
¿Qué debes tener en cuenta cuando ya te hayas decidido a adoptar?
Cuando se acude a un albergue para adoptar a un animal, es importante tener en cuenta las indicaciones de los cuidadores del centro. Ellos, mejor que nadie, conocen el carácter de cada animal y, por tanto, nos pueden asesorar con acierto sobre el que mejor se puede adaptar a nuestro ritmo.
El estilo de vida de los dueños debe adaptarse al animal adoptado y no al revés. De esta manera, si tenemos poco tiempo para pasear a un perro, es más aconsejable adoptar a un gato; y si nos gustan los largos paseos por el campo y practicar deporte al aire libre, un perro activo será feliz a nuestro lado.
Otro punto muy importante a tener en cuenta, es nuestro lugar de residencia, ya que en caso de vivir en la Comunidad de Madrid, tenemos que ser conscientes de la obligatoriedad de contar con un seguro para nuestra mascota.
Si quieres estar más informado o informada, te recomendamos leer nuestro post sobre la obligación de contar con un seguro de responsabilidad civil para perros en Madrid.
Hay que tener en cuenta que se adopta al animal y a su pasado. Los animales que viven en los albergues tienen una trayectoria vital tras de sí que se asume cuando se les adopta. Las historias de maltrato o abandono suelen acompañar a los perros y gatos de estos centros de acogida. Si su pasado es triste, se sentirán muy agradecidos hacia el buen trato de las personas que los respeten, pero necesitan un período de adaptación. La paciencia y el apoyo de los nuevos dueños resultan fundamentales.
El asesoramiento del veterinario, tanto para su atención sanitaria como para su alimentación o educación, es de gran ayuda para conseguir que el recién llegado miembro de la familia esté sano y feliz. Y por supuesto uno de nuestros seguros para perros será el mejor regalo de bienvenido que puedes hacerle, ¿lo contratas ya?